Esto llevó a la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo a realizar un cateo, ordenado por un juez, para buscar evidencia que sustentara las denuncias de las demandantes por lo que el Centro Holístico Akalkí fue clausurado.
El establecimiento es uno de los miembros asociados a una de las 100 filiales de la AMHMH en México, la Asociación de Hoteles y Servicios Turísticos del Centro y Sur de Quintana Roo; quien hace el llamado al fiscal Óscar Montes de Oca Rosales para liberar el inmueble.
El gremio de hoteleros asegura que el Centro Holístico Akalkí es ajeno a las actividades que realizaba Ricardo Ponce en los denominados “cursos o retiros de autosanación”, pues él rentó las instalaciones, y la transacción se hizo entre particulares de buena fe por parte del centro de hospedaje.
Afectación al turismo en Bacalar
La Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles añade en su documento que reprueban y rechazan cualquier acto ilícito que dañe o afecte la salud física, mental y emocional de las personas que visitan los establecimientos.
“Nos solidarizamos con las víctimas que se han visto afectadas, y recomendamos a nuestros asociados presten su total colaboración a las autoridades para el esclarecimiento de este lamentable hecho. Igualmente nos mantendremos atentos y respetuosos al proceso legal que se lleva a cabo”, indica el mensaje de la asociación.
Sin embargo, la solicitud se hace ante la seria afectación que hay al sustento de familias que trabajan en el Centro Holístico Akalkí al encontrarse imposibilitado para operar de forma regular, sobre todo luego de la devastación de la pandemia de Covid-19.
Esto agrava más la situación de los trabajadores del establecimiento, aunado al daño a la imagen de Bacalar como destino turístico familiar, concluye la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles.