Aeroméxico confirmó que inició el proceso voluntario de reestructura financiera bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos, para fortalecer su posición financiera y liquidez, proteger y preservar las operaciones y activos, e implementar los ajustes operativos necesarios para sortear la crisis de la covid-19.
Mediante un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), Aeroméxico aseguró que continuará operando de manera normal, para ofrecer a sus clientes el servicio que caracteriza a la línea aérea.
En busca de liquidez
Apenas la semana pasada, Aeroméxico desmentía que se hubiera iniciado este proceso, y que se encontraba analizando alternativas para lograr una reestructura ordenada de sus compromisos financieros.
Ahora, la aerolínea bandera de México informa que está en conversaciones para obtener un nuevo financiamiento preferencia, como parte de la reestructura dentro del procedimiento bajo este Capítulo 11.
Aeroméxico se dijo confiada de finalizar los compromisos formales para el financiamiento DIP que, junto con el efectivo disponible de la compañía, y sujeto a la aprobación de la corte competente del Capítulo 11, proporcionará suficiente liquidez para cumplir con sus obligaciones futuras en forma oportuna y ordenada.
Bajo la Ley de Quiebra, los acreedores deben renunciar a cobrar los adeudos adquiridos hasta el momento, aunque la empresa que se sujeta a este beneficio, requiere financiamiento para su operación diaria, para eso es el instrumento DIP.
Aimia da soporte
Justo este lunes 29 de junio, Aeroméxico también daba a conocer que llegó a un acuerdo con la sociedad de inversiones Aimia, para lograr un apoyo financiero total de 100 millones de dólares. Ambas compañías tenían un acuerdo comercial (CPSA) que logró una extensión de 20 años del plazo actual, y ahora tendrá vigencia al 13 de septiembre de 2050.
También se acordó la modificación del Acuerdo de Accionistas para otorgar a Aeroméxico una opción de compra con un plazo de 7 años por 48.9% de participación de Aimia en PLM (operador de Club Premier) a un precio de 400 millones de dólares, entre otras opciones.
Capítulo 11, la salida
El director general de Aeroméxico, Andrés Consea Labastida señaló que “con el proceso de reestructura del Capítulo 11 fortaleceremos nuestra posición financiera e incrementaremos nuestra liquidez, creando al mismo tiempo una plataforma sustentable que nos permita transitar con éxito la actual incertidumbre económica global”.
“Nuestra industria enfrenta desafíos sin precedentes derivado de una significativa reducción en la demanda de pasajeros a nivel global, por lo que estamos comprometidos en adoptar las medidas necesarias para operar de manera continua y eficiente en esta nueva realidad, y con ello estar mejor preparados para un futuro exitoso durante y después de la pandemia”, agregó el directivo.