Después de darse a conocer los resultados de la Consulta Ciudadana sobre el proyecto del Nuevo Aeropuerto internacional de México (NAIM), resulto como ganador el proyecto de convertir a la base militar de Santa Lucía como la opción ganadora para el desarrollo de la nueva terminal aérea que operará en el Valle de México.
Hace un par de meses el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, dio a conocer el “plan maestro” para la construcción del aeródromo, que será conocido como: Aeropuerto Internacional de Santa Lucía (AISL), el cual estará ubicado al norte de la ciudad en el municipio mexiquense de Zumpango.
De acuerdo con el documento, la obra se desarrollaría en dos años sobre una superficie de 23.2 kilómetros cuadrados, con un costo de poco más de 70,000 millones de pesos.
Según las expectativas que se dieron a conocer después de anunciar los resultados de la consulta, en un lapso de tres años estarán operando las terminales de la Ciudad de México, de Toluca y las pistas de la base militar de Santa Lucía para resolver los problemas de saturación que existen en el actual AICM.
El proyecto del (AISL) incluye dos pistas una de 5.1 km y otra de 4.6 km, además de una base aérea de 4.7 km2, una torre de control, una terminal con 33 posiciones, pistas de rodaje (11) y un edificio de servicios.
El plan maestro también plantea un área designada a una futura ampliación, una “área urbanizable” de 62 hectáreas y una área para los servicios aeroportuarios.
La comunicación del aeropuerto estará a cargo de una vialidad de acceso que conectaría con el Circuito Exterior Mexiquense, así como un tren rápido con conexión al actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
La inversión para el tren rápido sería de 43,677 mdp, mientras que la vialidad y un sistema de autobuses que correría por ella requerirían 19,613 mdp, detalla el plan maestro.
El proyecto se pondrá en marcha cuanto antes, y según el mandatario electo, este proyecto resolverá el problema de tráfico aéreo hasta por 50 años.