Según un estudio realizado por Booking, las experiencias inmersivas alcanzarán el siguiente nivel en 2018, con viajeros tecnológicos que intentarán conocer mejor el destino y el alojamiento antes de reservar. La inteligencia artificial y la tecnología digital están ayudando a los consumidores a aportar por destinos inteligentes.
Un 29% de los viajeros asegura sentirse cómodo permitiendo que la internet les planee un viaje en base a los datos de su historial de destinos. Y al 50% no les importa de si quien lo hace es una máquina o una persona real, siempre y cuando todas las preguntas tengan respuesta.
Además, el 64% dice que le gustaría conocer el destino o el alojamiento antes de la compra a través de una vista previa en realidad virtual, mientras que el 50% considera que las sugerencias personalizadas para elegir destino o alojamiento alientan a reservar un viaje. En resumen, en 2018, la tecnología será quien nos siga guiando a la hora de encontrar las mejores estancias y las experiencias más inolvidables.
Pepjin Rijvers, director de marketing de los comentarios de Booking, asegura que a medida de que la tecnología avanza, “también está avanzando y mejorando la forma en la que viajamos. Se nos da el poder para planificar nuestras vacaciones perfectas, lo que hace que sea más fácil explorar más a fondo que nunca”.