Hoteles flotantes llega esta nueva tendencia de la industria

Dubai, sigue sorprendiendo en el plano de creaciones arquitectónicas, y ahora no solo miran hacia el cielo si no que sino que bucean en el océano, ya que están a punto de inaugurar un nuevo hotel flotante.

Este hotel es las villas flotantes Caballito de mar, diseñadas y construidas por la compañía inmobiliaria Kleindienst dentro del resort 'El corazón de Europa', que incluye seis islas artificiales, más de una docena de hoteles y las primeras calles climatizadas del mundo.

Para finales de año ya estarán listas unas 50 villas, que serán 131 cuando termine 2017. Flotando como barcos anclados, cada una de ellas consta de tres pisos, uno de ellos sumergido, con dos enormes ventanas de 25 metros cuadrados que ofrecen espectaculares vistas de la vida marina.

De este modo, como ha explicado el arquitecto del proyecto, Gianfranco Rasile, “el cliente puede experimentar la sensación de presenciar la vida marina a su alrededor al estar rodeado por ella”. Las villas albergan dos dormitorios bajo el agua, terraza al aire libre y jacuzzi en la azotea con suelo de cristal.

La gente, explica Kleindienst, “piensa que está sentada en el fondo del mar, pero está anclada al menos a 1,5 metros de la cama y siempre arriba y abajo todos los días con el movimiento de la marea”.


Como las ventanas sumergidas son sólo de 9,5 centímetros de grosor, parece que no hay nada entre el cliente y la vida marina, pero no están hechas de cristal, porque no podrían soportar la presión del agua, sino de material acrílico como los acuarios y submarinos. Así, la villa dispone de vistas cristalinas con la durabilidad para soportar años en agua salada, dado que el Mar Arábigo tiene una alta concentración de sal. De hecho en su interior han utilizado materiales como teca y mármol que puedan resistir altas temperaturas y una alta concentración salina en la atmósfera”.

Puede sorprender el asociar el Golfo Pérsico con una abundante vida marina, pero Kleindienst lo tiene todo pensado y ha creado su propio mundo submarino: “Durante años hemos acudido a zonas donde la construcción estaba afectando a los arrecifes de coral y los hemos recolocado en el Golfo para salvarlos, de manera que tenemos más de 100.000 corales en 186.000 metros cuadrados de fondo marino”.

El coral atrae a los peces y éstos a sus depredadores. El Golfo está lleno de vida marina, incluyendo a los caballitos de mar que dan nombre a las villas, aunque las especies en peligro de extinción necesitan más ayuda de los biólogos marinos para reproducirse. En este sentido Kleindienst destaca que “es como una sorpresa en el océano, ya que puedes ver hasta 30 especies diferentes, tortugas y barracudas entre ellas, desde las habitaciones submarinas”.